Month: noviembre 2014

Calderas de biomasa: La demanda de productos aumenta cada temporada de calefacción.

El mundo de la calefacción ha conocido algunas buenas noticias en los últimos tiempos: aerotermia, condensación y biomasa. Palabras hace un tiempo desconocidas, pero que ahora ocupan la agenda de las marcas del sector. La biomasa, que es la que tratamos en este informe de mercado, vive un momento realmente álgido, como si fuese ajena al depauperado mundo de las renovables al que pertenece.

La biomasa, y sus productos derivados, como calderas, estufas o pellets, mostraron hace nada sus cartas anuales en la feria Expobiomasa

La biomasa, y sus productos derivados, como calderas, estufas o pellets, mostraron hace nada sus cartas anuales en la feria Expobiomasa, donde volvió a verse que este mercado se encuentra en plena expansión.

El sector doméstico ha experimentado un fuerte aumento en calderas y estufas de biomasa en los últimos tiempos, ya que los usuarios ven en esta energía una alternativa más económica y ecológica que permite reducir su factura de calefacción. Se trata de una inversión que permite un ahorro importante sobre los sistemas tradicionales, con un plazo de amortización que cada vez es más rápido.

Pero no sólo en el segmento doméstico se ha disparado el uso de la biomasa, también está sucediendo en los edificios públicos. Colegios, residencias, ayuntamientos, redes de calor, polideportivos municipales, hospitales, piscinas públicas, etc. son algunos de los edificios que se han subido a las ventajas de la biomasa en los últimos dos años, aumentando en un 70% el número de instalaciones, de ámbito público-administrativo, que emplean biocombustibles sólidos para abastecer sus necesidades energéticas de calefacción y Agua Caliente Sanitaria (ACS).

Esta favorable tendencia tiene su correlación en la apuesta cada vez mayor de los fabricantes por el desarrollo de este tipo de productos. Muchos de ellos están apostando por estas soluciones a la vista de la demanda. Y es evidente que las cifras van en consonancia con el auge del mercado. El consumo de biomasa para uso térmico en España se ha disparado. Los españoles pasaron de consumir 100.000 toneladas de pellets en 2010 a 380.000 toneladas en el año 2013. Y para 2020 se habla de superar 1.100.000 toneladas.

Calderas de biomasa: el retorno a la leña

Calderas de biomasa: el retorno a la leña

4 noviembre 2014

Calderas de biomasa: el retorno a la leñaMás madera para nuestra calefacción: las calderas de pellets pueden ser una solución ecológica que nos haga ahorrar hasta 600 euros al año. Pero no son adecuadas en todos los casos: están fundamentalmente pensadas para quien no tiene acceso al gas natural.

ESTUFAS Y CALDERAS DE BIOMASA

 

El gas natural sigue siendo la opción más recomendable para la mayoría de usuarios. Enfrentamos a las principales calderas del mercado para saber cuál es la mejor:

Comparador de Calderas

El bosque llega a tu casa

Las estufas y calderas de biomasa se alimentan con residuos orgánicos como huesos de aceituna, cáscaras de nuez o astillas de restos de podas y talas.

La forma más sencilla y eficaz de consumir biomasa son los pellets, pequeños cilindros que son el resultado de comprimir residuos como los serrines y las astillas de los árboles. Tienen alta densidad y gran poder calorífico para calentar tanto nuestra casa como nuestro agua, e incluso nuestra comida.

Tipos de calefacción con biomasa

Si elegimos una estufa, es posible que necesitamos algún otro sistema de calefacción para la casa.

Si elegimos una caldera, irá conectada al circuito y se ocupará de calentar toda la casa y proporcionarnos también agua caliente.

  • Estufas de aire de pellets. Con una potencia de entre 5 y 22 kW, calientan con aire y encajan mejor en habitaciones diáfanas. Precio: desde 1.000 euros (más baratas si son de baja potencia).
  • Estufas de agua de pellets o termoestufas. Con una potencia de entre 11 y 29 kW, generan calor para calentar a habitación donde se encuentran y al mismo tiempo son capaces de producir agua caliente. Precio: unos 2.500 euros (más baratas si son de baja potencia).
  • Calderas de pellets. Con una potencia de entre 8 y 300 kW, se diferencian según lo automáticas que sean. Las de gama media-baja cuestan entre 5.000 (vivienda unifamiliar) y 15.000 euros(bloque de viviendas). Las de la gama media-alta son completamente automáticas en su encendido, combustión y limpieza. Esta última opción permite que el consumidor se despreocupe, pero cuesta más: 10.000 euros para una vivienda unifamiliar y hasta 30.000 euros para una comunidad.
  • Calderas de pellet de condensación. Las calderas de condensación más conocidas son las de gas, pero ya podemos encontrar en el mercado calderas de condensación alimentadas con biomasa. Gracias a esta tecnología se consigue ahorrar hasta un 12% de combustible, y el rendimiento de los equipos aumenta hasta un 105%. El “pero “es su precio, que supera en 2.500 euros el de una caldera de biomasa normal (o sea, oscilará entre 7.500 y 17.500 euros). La caldera de condensación utiliza el calor contenido en los gases de escape, bajando gradualmente su temperatura hasta que el vapor de agua se condensa y recupera así el calor.
  • Calderas y estufas de leña. Al no funcionar con pellets, rinden peor (el combustible tiene menos poder calorífico y es más difícil regular la temperatura). Las calderas oscilan entre los 2.000 euros para una vivienda y los 6.000 para un bloque. Las estufas se encuentran desde 400 euros.

¿Utilizas la calefacción de forma eficiente? Siete consejos para ahorrar hasta un 20%.

Con la llegada del otoño, hay que prepararse para recibir al frío. Lacalefacción es uno de los gastos más importantes del año y, por este motivo, se recomienda hacer un uso eficiente de la energía que se utiliza para calentar la vivienda y así evitarnos disgustos con las facturas. Para ello, resulta imprescindible elegir el tipo de calefacción que mejor se adapte a las necesidades de la vivienda.

Hay que tener en cuenta factores como la zona donde está situada la vivienda, el aislamiento, cuantas personas residen en ella y hasta cuánto tiempo pasan en su interior. En este cuadro, elaborado por el portal Casaktua.com, analizan los distintos tipos de calefacción, sus costes y el tipo de vivienda para el que se recomienda. Los precios de la siguiente tabla no incluyen impuestos ni IVA.

Según datos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía, organismo perteneciente al Ministerio de Industria, Energía y Turismo, un hogar español consume 10.521 KWh al año y prácticamente la mitad de ese consumo se gasta en calefacción. Los expertos del portal inmobiliario aseguran que escoger bien el sistema para calentar nuestro hogarpuede suponer un ahorro energético medio del 20%.

La Unión Europea está implantando medidas extraordinarias para reducir el consumo de las calefacciones centrales, obligando a los países comunitarios a garantizar que los edificios dispongan de dispositivos de medición individuales antes del 31 de diciembre de 2016. Este sistema implica un ahorro medio de 224 euros por hogar y la disminución de 2,4 millones de toneladas de CO2 al año, según un estudio realizado por la Universidad de Alcalá.

Invertir en el aislamiento, compensa

Uno de los puntos clave a la hora de ahorrar energía es el aislamiento de la vivienda. Los expertos de Casaktua.com consideran que una vivienda con un buen aislamiento térmico puede llegar a ahorrar hasta un 30% de energía, un porcentaje muy alto con un efecto directo tanto en la factura de la calefacción como en las emisiones de CO2 al medio ambiente.

En este sentido, para lograr un consumo eficiente de la energía y sin necesidad de grandes inversiones, los expertos de este portal inmobiliario recomiendan:

1.- Comprobar que no existen fugas de energía en ventanas y puertas exteriores. En caso positivo, instalar burletes y cintas de material aislante para ajustarlas.

2.- Reforzar el aislamiento térmico de las paredes, suelos o techos a través del estuco sintético para reducir filtraciones de aire. En su defecto, también se pueden utilizar soluciones más sencillas como pinturas que reflejan la luz y consiguen mantener el calor.

3.- La colocación de alfombras permite reducir la pérdida de calor por el suelo. Además, los aislantes detrás de los zócalos son una buena manera de evitar fugas y mantener una sensación térmica ideal.

4.- En invierno, es importante no olvidarse de bajar las persianas durante la noche y aprovechar al máximo las horas de sol dejando entrar los rayos a través del cristal de la ventana durante el día.

5.- Es fundamental ventilar bien la casa para evitar la acumulación de gases y humedades, tanto en invierno como en verano. Con 10 minutos es suficiente para renovar el aire de una habitación. Si nos pasamos de tiempo podemos enfriar en exceso la vivienda y por tanto tener que gastar más calefacción para recuperar una temperatura agradable.

6.- No tapar los radiadores ni utilizarlos para secar ropa mojada en la medida de lo posible, ya que se incrementa el consumo de energía y la pérdida de calor.

7. Por último, se recomienda realizar un correcto mantenimiento de la caldera para que el consumo sea óptimo.